Faltan 4 días para que termine el año.
Aún no puedo definir este 2016 con una palabra y me siento: nostálgica, emocionada, sorprendida y tengo todas las emociones revueltas. No sé en qué momento el año se fue, de lo único que estoy segura es que 2016 estará más que guardado en mi corazón.
Este año logré cosas que eran impensables para mi: me fui de viaje sola, atravesé el mundo para estar conmigo misma y darme cuenta que soy tan fuerte como quiera ser, que los sueños son palpables y que decir gracias, por favor, sonreír y ser humilde son palabras y actitudes que en cualquier idioma se agradecen.
Conocí personas increíbles que jamás hubiera imaginado y me quedo con lo que cada una de ellas sembró en mí; no importa en qué parte del mundo estén.
Atravesé una parte de el mar y aprendí que el trabajo en equipo y la confianza son armas indispensables en la vida que deben ser cuidadas como tesoros. La gratitud, dar las gracias por compartir es mi nuevo lema de vida, hay que dar las cosas o ejercer acciones desde el corazón para que estas se multipliquen.
Decidí alejarme de las cosas que no me hacían feliz, de las personas que no aportaban nada en mi vida, sin embargo doy las gracias por ellas porque me di cuenta de lo que no quería ser. También di la bienvenida a personas nuevas que se han vuelto mi familia y que sin ellas el día a día sería muy aburrido.
El año que viene como al anterior no pediré nada más que estar cerca de mi familia, de mis amigos, disfrutar a la pareja que tengo y hacerme feliz cada día más con cada reto y cada logro, lo demás lo que sueñe, invente, o quiera hacer vendrá solo y cargado de la mejor energía.
Y como último reto de este año… mejor se los voy a guardar para los primeros blogs del 2017, estarán tan emocionados como yo (se lo aseguro).
No importa que metas lograste este año o si el camino que esperabas no surgió como planeaste, en esas ocasiones siempre me funciona la frase “nada pasa porque sí”.
Nos veremos en 2017 para compartir más cosas, muchas felicidades y que tengas un cierre de año estupendo, que el año que viene será mil veces mejor.
